Tiempo sin musa...

Hace mucho tiempo que mis dedos no tenían la necesidad de expresar nada sobre mi alma. Me he mantenido en silencio observando como el mundo cambia o desea cambiar entre indignad@s, elecciones, tramas y corrupciones.  He derramado alguna lágrima en este tiempo alzando mis palmas en pos de buscar mas derechos y libertades y he vuelto a callar de nuevo. 

He visto pasar los meses sin ningún tipo de fruto y tomando decisiones equivocadas, o por lo menos hasta hace unos días así me parecían. Ahora y después de una conversación con una persona en la estación de tren, veo que hice bien cambiando de trabajo por la situación tan penosa que se vivía en la oficina y que de alguna manera me había llevado a ser una ameba. 

Pero en este tiempo lo que es realmente importante es que vuelvo a ver los reflejos de mi musa, aun solo veo su sombra y caprichosa se esconde para que no pueda insinuarme nuevos escritos y tribulaciones. Pero huelo su presencia, aroma de papel viejo y manoseado, de silencio absoluto y hermetismo. Adoro la sensación de ser el paparazzi de mi propia vida. Me siento ladrona de mis vivencias, robo los recuerdo y los plasmo en letras. Juez de mis acciones, detractora de mis sentimientos y como no ... me siento mi centro y el eje de todo mi alrededor. Me siento, y eso es lo que mas me importa, volver a sentirme a mi misma. Ya era hora de seguir avanzando. Tengo la intención de continuar el camino, ya me he puesto de pie y ahora veo el mundo de nuevo desde otro angulo. Y aun no he analizado si desde esta nueva visión todo me parece mas amable o no, pero ya lo haré, despacio pero sin detenerme. 

Si tuviera que dibujarme seria sencillo, estaría en pie al lado de una gran roca, en el claro de un bosque cualquiera y a mi alrededor lindando un circulo imaginario todos los componentes de mi vida. Ahora toca ampliar de nuevo el circulo e interactuar. 

Vuelvo a romper el silencio....